Si estas recibiendo este cordial saludo es porque una vez más decides acompañarnos en una nueva lectura, de nuestro Blog semanal de Vargas Arquitectura e Ingeniería SAS. Y por esa razón queremos agradecerte, porque este es el impulso necesario para cada semana conseguir un tema y desarrollarlo de manera crítica y profesional, para que genere un pequeño aporte de cara a ser una mejor sociedad. Esta ocasión queremos platear un tema que de seguro nos afecta a todos por igual en cada una de las ciudades de domicilio, para nuestro caso la ciudad de Cartagena, Colombia. Ante la necesidad de aislarnos por las medidas adoptadas por el COVID-19 e incluso antes, hemos visto un aumento en las quejas de los residentes de la ciudad y usuarios de los diferentes servicios públicos domiciliarios por las constantes fallas e interrupciones inesperadas en la prestación de dichos servicios, estos que nos ofrecen como mecanismos para tener una mejora calidad de vida, pero lo cierto es que esa consigna está fallando y consigo generando traumatismos e inconvenientes.
Como lo mencionamos anteriormente, en la ciudad se ha aumentado el sentir generalizado de la población de la in eficiencia de las redes de servicios públicos domiciliario, que al parecer no los afecta las estadísticas de in disponibilidad, o mejor aún seguimiento de la superintendencia de servicios públicos, por lo cual se llegó a un punto alto de descontento recientemente, con una nueva falla de la red de acueducto, dejando sin servicio a casi el 80% de los usuarios, de manera repentina y sin posibilidad de aprovisionarse para poder suplir sus necesidades básicas, en las cuales se hace necesaria el preciado líquido.

Dentro de las quejas, la más reiterativa fue el colocar en tela de juicio la calidad del tubo madre de alimentación desde la captación hasta los tanques de procesamiento del acueducto, el cual recientemente ha presentado más de 5 daños, causando el mismo nivel de estrago en la población, por lo que surgen dudas respecto a la calidad de los materiales, idoneidad de los diseños, aumento en la demanda, o para algunos más entendidos del tema cuestionar la vida útil que les falta a las redes para quedar obsoletas y requerir modernizarlas.

Pero pensábamos que el tema era solo de un servicio y nos dimos a la tarea de hacer una búsqueda rápida y nos encontramos que se presenta el mismo fenómeno con las redes de suministro eléctrico y de telecomunicaciones que aun dependen del cobre o que comparten una fuente, por lo que nos pareció conveniente unirnos a la causa de poder encontrar el motivo de dichas interrupciones constantes o in eficiencias en la prestación de los servicios. Y poder lograr hacer un llamado a las empresas prestadoras de servicios y a las autoridades locales para dar soluciones ajustadas a la realidad de la ciudad.
A lo que realizado un análisis rápido de los casos y de las zonas donde se presentan dichos daños que generar gran afectación en la totalidad de la red, nos encontramos con un término que puede resultar una de las causas más probables “la Obsolescencia o vida útil restante de las redes de servicio”.
OBSOLESCENCIA.
El termino se refiere a cuando un objeto o cosa se vuelve antigua o sencillamente deja de funcionar por el paso del tiempo. Lo cual podemos aplicar al caso de las redes de servicios públicos domiciliarios y encontramos gran relación, pero debemos ir más allá y tratar de entender por qué una ciudad que apenas da muestras de desarrollo, sus redes de servicios públicos ya dan muestra de rezago, ineficiencia e inoperatividad.
Factores que inciden en la obsolescencia de la red
Antigüedad de las redes.
Es un punto relevante en nuestro planteamiento, por lo que en nuestro ejercicio diario nos encontramos redes con una antigüedad igual o superior a los 30 años de existencia, como es el caso de tuberías de asbesto-cemento, concreto para el caso de las redes de agua potable y alcantarillado, redes de cobre para el caso de las telecomunicaciones y energía, estas últimas aun no contando con sistema anti fraude, que ayude a controlar el gasto excesivo por perdidas del servicio.
Todas estas redes de acueducto y alcantarillado con evidentes estados avanzados de desgaste, las cuales representan un riesgo inminente incluso ante a la misma operación del servicio y las diferencias de presiones. (Seguramente lo ocurrido en el último daño presentado en la red de acueducto). Para el caso de las redes eléctricas, nos encontramos que los cables se sobrecargan hasta el punto de incendiarse al causar cortocircuitos, siendo este el problema más recurrente de la red.
Crecimiento acelerado de la población, conlleva a mayor demanda de los servicios.
Siendo la población una variable a tener en cuenta al momento de realizar cualquier diseño para una red de servicios públicos, por lo que se debe estimar cual es la capacidad del servicio a ofrecer y de allí derivar todos los componentes que harán parte del sistema de almacenamiento y distribución para la prestación del servicio. Por lo cual se vuelve importante la afectación que tienen las redes ante el crecimiento de la demanda por el aumento de la población. Alcanzando de manera rápida los tiempos máximos para lo cual fue diseñado el sistema. Este parámetro genera sobre cargas a las redes debido a los picos de demandas en esas zonas donde se presenta mayor concentración de viviendas modificadas en edificios, y que simplemente al sobrepasar esos parámetros para los cuales fueron diseñadas, entonces se presentan los inconvenientes.
Para el caso de las redes eléctricas se presentan sobrecargas que incendian los cables y hacen estallar los transformadores y en los casos más eficiente las cañuelas se disparan como mecanismo de protección. En cuanto a las redes de agua y gas se pueden presentar perdidas de presión en la prestación del servicio y para el alcantarillado desbordamiento de las redes, presentándose el vertimiento de fluidos y sólidos en la superficie, comprometiendo la salud pública.
Conexiones fraudulentas y robo de infraestructura.
Este aspecto hace aparición y se convierte en un punto de mucha relevancia y que genera gran afectación para los operadores y la correcta prestación del servicio. Es una queja constante de parte de los prestadores de servicio, por lo que siempre tienen una gran cartera por este concepto, afectando sus proyecciones de funcionamiento y a la larga de inversión. Históricamente en la costa caribe colombiana es donde más se presenta este fenómeno, de pronto por la idiosincrasia, chabacanería o simplemente por la llamada malicia indígena, la cual lleva a muchos a instalar conexiones fraudulentas (Trampas) para poder disfrutar de mayores cantidades de consumo, pero sin cancelar la totalidad, como quien dice, que lo paguen los demás.


Este tipo de conductas se presentan por igual para todos los servicios, acueducto, energía eléctrica, gas y servicio por cable, lo cual ha llevado a las empresas a crear departamentos exclusivos para poder controlar el robo descarado de parte de las comunidades y de cierta manera poder garantizar la prestación de su servicio.
Poca inversión en mejoramiento de la red existente.
Estas condiciones anteriormente descritas deben ser entendidas por todos nuestros lectores y pobladores de cada ciudad, como las principales causas de las fallas en la prestación de los servicios públicos domiciliarios, por lo cual no, solamente podemos culpar a las empresas prestadoras y al estado de no generar mayor inversión o proponer una solución de raíz a los problemas, sino que los usuarios también deben concientizar el uso racional de cada servicio, así como adoptar medidas que no generen el desequilibrio en la prestación del servicio, desde el punto de vista de los parámetros de diseño y capacidad de cubrimiento de la demanda. Esto lo mencionamos por que imposibilita las empresas prestadoras del servicio proyectar sus redes de acuerdo a la demanda y oferta, y más bien volviéndolas reactivas a esperar que pase un daño para identificar la raíz del problema y tratar de solucionarlo, pero todo esto se da después de ya haber generado indisponibilidad en el servicio y mala prestación al usuario final.
Pero no quintándoles su responsabilidad de hacer todo lo humanamente posible para ofrecer un servicio de calidad y con garantías.
Proposición de mejoras
Las empresas de servicio como propietaria de la infraestructura de redes, los cuales hacen parte de sus activos, deberían proponer planes o proyectos de mejora continua. Iniciando por un conocimiento exacto de sus redes, para poder ejecutar esquemas de mantenimiento preventivo que evite la ocurrencia de eventos que pongan en riesgo la disponibilidad del servicio.
Análisis de datos: Debería ser responsabilidad de las empresas prestadoras el monitorear de manera contante como se da el crecimiento de las zonas donde prestan sus servicios, para así poder motivar proyectos de ampliación o mejoras, que anticipen la ocurrencia de fallas en la red, y no sea el cliente final quien se vea afectado por la falta de previsión.
Proyectos de actualización, modernización y mejora de las redes de servicios públicos existentes, con nuevos materiales y parámetros de diseño ajustados a la realidad actual de la ciudad, como por ejemplo que somos una ciudad con una población de más de 1’000.000 de habitantes, cuando históricamente según el DANE (Departamento Nacional de Estadística) no sobrepasábamos esa cifra, la cual fue actualizada por el último Censo Oficial del año 2019.
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Algunas conclusiones.
Luego de analizar un poco el tema con detenimiento y desde un punto de vista más técnico, no pretendemos deslegitimar el sentir de una comunidad con respecto a la calidad de los servicios públicos que le prestan, más bien queremos aportar un insumo que ayude a entender la problemática y poder hacer más llevadera la situación. Por qué lo cierto es que muchas de estas conductas seguirán por los próximos años al menos que haya una concientización de ambas partes, y entender cuáles son las obligaciones y responsabilidades para con el sistema. Y no sea utilizado como la excusa para la desidia y dejadez de parte de los operadores, aduciendo poca capacidad de inversión en modernización de redes.
A las empresas de servicios les solicitamos mayor humanización de sus servicios y que pongan como principal objetivo de su función la buena prestación del servicio y la satisfacción de sus clientes, sin descuidar el mantenimiento de sus redes como vehículo para su éxito. Así como lograr entender por qué las redes de servicios públicos de la ciudad se están quedando pequeñas, anticuadas u obsoletas, y lanzar planes que nos ayuden a mejorar la percepción respecto a la prestación del servicio. Sabemos que es posible que por la antigüedad de la misma y los altos costos de inversión que requiere para su modernización no es una tarea fácil de hacer, pero cada día surgen nuevas tecnologías que ayudan a renovar las redes existentes, prolongando su vida útil, generando poco impacto social y lo más importante a una relación Costo/Beneficio financiero para estos operadores que hacen cada día más viable la ejecución de este tipo de proyectos. por lo cual te invitamos a visitar nuestra pagina web: www.varqing.com
Entonces cada vez que seamos testigos o sintamos los estragos de un problema generado por la interrupción de la prestación de un servicio público, preguntémonos cual puede ser la causa y si está relacionado a factores externos o simplemente a lo antiguo y obsoleto que se ha vuelto la infraestructura. Ante lo que recomendamos siempre estar preparados y aprovisionados, por que de seguro serán muchos mas este tipo de eventos lo que se presentaran.
Para este tema consideramos importante destacar la experiencia relacionada con el tema, en cabeza de Luis Carlos Vargas, Ing. Civil, MBA- Dirección de Proyectos, con experiencia de 10 años en infraestructura de redes de servicios públicos, donde he trabajado con telecomunicaciones, acueducto, alcantarillado, gas y eléctricos.
Vargas Arquitectura e Ingeniería S.A.S., con sede en la ciudad de Cartagena - Colombia, actualmente ofrece servicios de arquitectura (diseños, paisajismos, remodelaciones); ingeniería (estudios técnicos, obras civiles, mantenimiento de edificaciones) y perforación horizontal (topos neumáticos, perforación horizontal dirigida, ramming, auger boring).
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